11 agosto, 2013

Hay dos partes:

La primera

Mi queridísima prima Jessica tenía un problema raro en las piernas, las tenía como sin huesos por lo que no se podía parar y tenía que arrastrase por el suelo  con mucho trabajo. Toda la familia estaba muy agobiada por esta situación, era realmente triste. 

A mi me daba mucha pena ver como sufría por no poder cargar a sus hijas. De pronto, en algún programa  se pedía ayuda para que ella pudiera rehabilitarse, Mis tíos y yo veíamos con todo el amor cómo iba luchando por volver a caminar, hasta que finalmente lo lograba. Ahí estaba el Ganso y sus hijtas dinamita para abrazarla fuerte por lograr volver a caminar.

 

2a parte:

Mi amigo Victor Civeira ponía una obra de teatro. Sólo había dos actores; él y yo.  No sé de qué era la obra, el punto es que no nos había dado tiempo de ensayar y llegaba el día del estreno. El teatro estaba lleno. Yo le decía que no se preocupara que yo iba a improvisar durante toda la obra y él me fuera dando pauta para saber por dónde tenía que seguir.

Comenzaba la obra y pasados 10 minutos, él me aventaba una piedra como parte de la historia. Entonces yo me tiraba el piso y decía de pelos, ya me mató y él puede seguir la obra solo.

En ese momento, al ver que yo ya no reaccionaba Victor pedía que bajaran el telón, me decía que no me podía morir pues toda la obra era entre los dos y si no no tenía chiste. Además me preguntaba que por qué no traía nada puesto de la cintura para abajo. Yo apenas lo notaba y le decía pues no sé… así me salí hoy. Cuando ibamos a volver a la obra, desperté.